Capítulo 2: Componentes lógicos: Representación de la información

Publicado por P. Ruiz en

Introducción.

Desde aquel primer ordenador basado en relés que creó George Stibitz en 1937 hasta los más actuales, todos han tenido algo en común: se han construido a partir de elementos biestables. Es decir, dispositivos capaces de alternar entre dos estados diferentes.

Esta lógica se aplica a multitud de soportes con características completamente diferentes: si pasa o no corriente eléctrica por un determinado punto, si existe o no un campo magnético en un lugar concreto de la superficie de un disco duro, si un punto en particular de la superficie de un DVD refleja o no la luz láser, etc. Es decir, dentro de un ordenador, la información se guarda en función de dos posibles estados.

Por este motivo, desde el principio se tomó la decisión de representar la información utilizando un sistema de numeración que también tuviese dos posibles valores. Es decir, el sistema binario.

Normalmente, la presencia de tensión (o campo magnético, o luz) se representa con el valor binario uno, y su ausencia con el valor binario cero. Esto se conoce como lógica positiva.

Lógicamente, si aplicamos el planteamiento contrario estaríamos hablando de lógica negativa.

La cantidad mínima de información que puede representar un ordenador es un dígito binario (en inglés, Binary digit), aunque para nombrarlo suele utilizarse el acrónimo bit.