Crea tu propio NAS con OpenMediaVault (parte 3)
En la primera parte de este artículo te explicábamos qué es un NAS, qué es OpenMediaVault y cómo hacer una instalación básica. En la segunda parte nos centramos en realizar una configuración inicial básica, cambiando la contraseña predeterminada, habilitando los servicios básicos y añadiendo un almacenamiento compartido.
Hoy cerraremos el ciclo aprendiendo a crear nuevas cuentas de usuario, compartir con ellas determinadas carpetas y usar el protocolo SMB/CIFS desde otros equipos con Windows o Ubuntu para acceder a ellas.
Crear una cuenta de usuario
Una cuenta de usuario nos permitirá identificar a quién utiliza los recursos y bajo qué condiciones. Un usuario que pretenda utilizar un determinado recurso deberá tener antes una cuenta en OpenMediaVault y que esa cuenta tenga permisos sobre ese recurso.
Para crear una nueva cuenta de usuario, comenzaremos desplegando la categoría Permisos de acceso en el panel izquierdo de la interfaz web de OpenMediaVault.
Así conseguimos que en la parte derecha se muestre la información sobre los usuarios que tengamos definidos en estos momentos. Como ves en la imagen, en mi caso aún no tengo ninguno.
Para crear un usuario, desplegamos la lista asociada al botón Añadir y hacemos clic sobre la opción Añadir.
Al hacerlo, aparecerá una nueva ventana donde escribir los datos del nuevo usuario. Como ves en la imagen, los únicos datos fundamentales son, el nombre de la cuenta y su contraseña (que deberemos escribir por duplicado, como es habitual, para evitar errores tipográficos).
Al cerrarse la ventana, comprobamos que el usuario ya aparece en la lista de usuarios. También aparece el mensaje en la parte superior, para informarnos de que la configuración ha cambiado.
A continuación, aparecerá el mensaje de confirmación y la barra de progreso que ya conocemos del artículo anterior. Poco después, la creación de la cuenta se habrá completado.
Definir la carpeta que compartiremos
Antes de comenzar a guardar archivos en OpenMediaVault, necesitamos definir la carpeta, o carpetas, que podrán ser accedidas por los usuarios. Para lograrlo, comenzaremos desplegando la categoría Permisos de acceso en el panel izquierdo.
De este modo conseguimos que en la parte derecha se muestre la información sobre las carpetas que tengamos compartidas en ese momento. Como ves en la imagen, en mi caso aún no tengo ninguna.
Al hacerlo, aparecerá una nueva ventana donde escribir los datos de la carpeta. Como ves en la imagen, deberemos incluir, como mínimo, la siguiente información:
-
El nombre con el que los usuarios verán la carpeta en sus equipos.
-
El dispositivo de almacenamiento donde se encuentra físicamente la carpeta. Será el dispositivo que añadimos en el artículo anterior.
-
La ruta de la carpeta dentro del dispositivo. Si la carpeta no existe en la ruta indicada, se creará de forma automática.
-
Los permisos que tendrá el administrador y los usuarios sobre la carpeta..
Al cerrarse la ventana, comprobamos que la carpeta ya se encuentra en la lista de recursos compartidos. También aparece el mensaje en la parte superior, para informarnos de que la configuración ha cambiado.
Para completar la tarea solo teneos que hacer clic sobre el botón Aplicar y seguir los pasos habituales.
Vincular la carpeta compartida con un servicio
El último paso en este proceso será vincular el recurso compartido (la carpeta) con el servicio desde el que vamos a acceder. Recuerda que en el primer artículo de esta serie habilitamos tanto FTP como SMB/CIFS.
Nosotros, a modo de ejemplo, usaremos SMB/CIFS, pero debes tener en cuenta que, para usarla a través de FTP, bastaría con repetir los mismos pasos.
Para comenzar, comenzaremos desplegando la categoría Servicios en el panel izquierdo.
Así conseguimos que, en la parte derecha, se muestre la información sobre la configuración del servicio SMB/CIFS. Sin embargo, en esta ocasión necesitaremos acceder al contenido de la solapa Compartidos.
Al hacerlo, el panel derecho cambiará para mostrar la información sobre las carpetas que estamos compartiendo, en estos omentos, mediante el servicio SMB/CIFS. Como ves en la imagen, en mi caso aún no tengo ninguna.
Al hacerlo, aparecerá una nueva ventana donde identificar la carpeta y definir todos los aspectos relacionados con su acceso.
De momento, nosotros nos limitaremos a localizar la carpeta en la lista Carpeta compartida y dejaremos el resto de los campos con su valor predeterminado.
Como en ocasiones anteriores, al cerrarse la ventana, comprobamos que la carpeta ya se encuentra en la lista y que, además, se encuentra habilitada. También aparece el mensaje en la parte superior, para informarnos de que la configuración ha cambiado.
Con esto, habremos terminado la tarea. Ya tenemos un servidor NAS con una carpeta compartida que puede ser accedida desde otros equipos de la red, usando las credenciales del usuario que hemos definido. Como es lógico, ningún otro usuario tendrá acceso a la carpeta compartida.
Durante el resto del artículo comprobaremos que, efectivamente, la carpeta se encuentra accesible, tanto desde Windows 10 como desde Ubuntu.
Acceder a la carpeta compartida desde Windows 10
Para acceder a la carpeta compartida desde Windows 10, basta con abrir el Explorador de archivos y, en el panel izquierdo, hacer clic sobre el elemento Red.
Al hacerlo, el panel derecho nos mostrará los diferentes dispositivos que tenemos accesibles en la red. Como ves en la imagen siguiente, uno de ellos se llama OPENMEDIAVAULT.
Al hacerlo, el contenido del panel será sustituido por las diferentes carpetas que se encuentren compartidas en el servidor OpenMediaVault. Nosotros, de momento, solo tenemos una.
Esto hará que se muestren todos los archivos que contenga la carpeta… Aunque en este momento aún está vacía.
Habrás observado que Windows 10 no nos ha pedido ningún tipo de autorización para acceder a la carpeta compartida. El motivo es que, tanto el nombre de usuario, como la contraseña que estamos utilizando en el ordenador con Windows coinciden con las credenciales de la carpeta compartida.
Esto resulta muy útil cuando queremos compartir datos con usuarios de un equipo local. Sin embargo, si hubiésemos tratado de acceder con una cuenta diferente (incluso en el mismo ordenador), habría aparecido una ventana como en la imagen siguiente:
Esto le aseguraría a OpenMediaVault que el usuario está autorizado para acceder a la carpeta.
Una vez que hemos accedido, podemos usarla con normalidad. Por ejemplo, podemos crear un nuevo archivo…
Clic con el botón derecho del ratón sobre un espacio libre de la ventana, y en el menú de contexto que aparece elegimos Nuevo > Documento de texto.
Aparecerá un nuevo archivo al que podemos darle el nombre que queramos,,,
En definitiva, podemos trabajar con la carpeta compartida del mismo modo que si se tratara de una carpeta local.
Acceder a la carpeta compartida desde Ubuntu 20.04 LTS
Finalmente, para completar el artículo, realizaremos la misma comprobación desde un ordenador que está ejecutando Ubuntu 20.04 LTS.
En realidad, el proceso es bastante parecido. Comenzaremos abriendo una nueva ventana del explorador de archivos.
Como antes, observamos que aparecen, en el panel derecho de la ventana, todos los recursos accesibles en la red (aunque, en este caso, es bastante más detallado).
Como en Windows, el contenido del panel será sustituido por las carpetas que se encuentren compartidas en el servidor OpenMediaVault. Aunque nosotros solo tenemos una.
Como en Windows, estamos usando en el equipo una cuenta de usuario y una contraseña que coinciden con las de la carpeta compartida en OpenMediaVault. Sin embargo, Ubuntu 20.04 LTS es menos benevolente y siempre nos pide que las escribamos.
Hemos dejado el valor predeterminado en el campo Dominio, que en este caso es WORKGROUP.
Finalmente, habremos accedido al contenido de la carpeta.
Como en Windows, también aquí tendríamos permisos para crear nuevos archivos, o modificar el contenido de los existentes… Pero creo que ya es suficiente por ahora.
Espero que te resulte útil.