Capítulo 9: Administración de los sistemas operativos
9.6. Rendimiento del sistema
En general, podemos definir el concepto de rendimiento como la rapidez con la que un equipo realiza las tareas que se le encomiendan (tanto las relacionadas con el propio sistema, como las relacionadas con las aplicaciones y servicios). En principio, el rendimiento del sistema estará limitado por diferentes aspectos:
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La velocidad del propio procesador.
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La cantidad y velocidad de la memoria principal.
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La velocidad de los dispositivos de almacenamiento externo (normalmente discos duros).
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La velocidad de las interfaces de red.
Evaluar el rendimiento en Windows
En el capítulo 4, ya mencionábamos unos artículos donde recurríamos al Administrador de tareas:
Sin embargo, si leíste alguno de esos artículos, comprobarías que el Administrador de tareas puede utilizarse con otros fines. Por ese motivo, un tiempo después publicamos otro artículo, donde abundábamos es sus capacidades:
Ambos artículos son de lectura obligada para entender este apartado.
Evaluar el rendimiento en Ubuntu
Como en el caso anterior, en el capítulo 4 también hablamos del Monitor del sistema de Ubuntu, e hicimos referencia a estos artículos:
Sin embargo, también podemos usarlo para obtener información sobre el rendimiento. Algo que comprobamos en los siguientes artículos:
Actividad 7: Comprobar el rendimiento del sistema
Comprueba el rendimiento de tus máquinas virtuales Windows y Linux e incluye imágenes donde se aprecien los valores.
Cada imagen deberá ir acompañada de una explicación textual de los datos mostrados y de tus conclusiones.
