Instalar un dominio desde la interfaz gráfica de Windows Server 2012 R2 (parte 2)

Publicado por P. Ruiz en

Como puedes deducir del título de este artículo, se trata de la continuación de Instalar un dominio desde la interfaz grafica de Windows Server 2012 R2 (parte 1). En definitiva, lo que significa es que deberás seguir las indicaciones que te dábamos en la primera parte antes de poder completar las tareas de esta segunda.

El objetivo final consistirá en disponer de un controlador de dominio para administrar los recursos de nuestra infraestructura de red. Como recordarás, en la primera parte habíamos instalado el rol Servicios de dominio de Active Directory. Ahora es el momento de convertir (promocionar) el servidor para convertirlo en un controlador de dominio.

Como vimos al final de la primera parte, después de realizar la instalación del rol Servicios de dominio de Active Directory, bastaría con hacer clic sobre el enlace Promover este servidor a controlador de dominio de la última pantalla del asistente. Así iniciaríamos la promoción.

No obstante, si hubiésemos cerrado la ventana, también podremos hacer uso del icono icono que aparece en la parte superior del Administrador del servidor.

En cualquier caso, hacemos clic en el enlace Promover este servidor a controlador de dominio.

Al hacerlo, se abrirá la ventana del Asistente para configuración de Servicios de dominio de Active Directory. En la primera pantalla, deberemos indicar el tipo de operación que queremos implementar:

  • Agregar un controlador de dominio a un dominio existente.
  • Agregar un nuevo dominio a un bosque existente.
  • Agregar un nuevo bosque.

Lógicamente, como en este caso estamos partiendo de una situación en la que no disponemos de infraestructura previa, la opción que deberemos elegir es la última. Cuando lo hagamos, en la parte inferior se nos solicitará el dominio raíz para el nuevo bosque. Si disponemos de un dominio registrado en Internet, aquí incluiremos el nombre de dicho dominio (p. ej. somebooks.es). Sin embargo, de momento supondremos que no es así y terminaremos nuestro dominio en .local (p. ej. somebooks.local).

Cuando hayamos escrito el nombre, hacemos clic en Siguiente.

Microsoft recomienda que todos los controladores de dominio sean también servidores DNS para asegurar que Active Directory esté siempre disponible.

En el siguiente paso (Opciones del controlador) indicamos el nivel de funcionalidad del controlador. Si no tenemos en la red controladores de dominio que ejecuten versiones más antiguas de Windows Server, deberemos elegir Windows Server 2012 R2 (que será el valor predeterminado).

Lógicamente, también podemos elegir un nivel de funcionalidad con Windows Server 2008 o (2008 R2) si pensamos añadir este tipo de controladores más adelante.

Como cabe esperar, cuanto más antiguo sea el nivel de funcionalidad que elijamos, más limitadas se verán las prestaciones de nuestro árbol de dominios.

Bajo el epígrafe Especificar capacidades del controlador de dominio, indicaremos que el equipo también actuará como Servidor de Nombres de Dominio (DNS). Además, aparecen dos opciones más: Catálogo global (GC) y Controlador de dominio de solo lectura (RODC).

El primero aparecerá seleccionado de forma obligatoria porque todo dominio debe tener un catálogo global y estamos instalando el único controlador que hay ahora mismo en la red.

Del mismo modo, dado que el servidor actual es único, no puede ser de sólo lectura.

Por último, antes de cambiar de página, deberemos escribir la contraseña del modo de restauración de servicios de directorio (DSRM). Como es habitual, se escribe por duplicado para evitar errores tipográficos.

Finalmente, hacemos clic sobre el botón Siguiente.

En el siguiente paso, Opciones de DNS, si dispusiésemos una infraestructura DNS anterior a la instalación del dominio, deberíamos especificar si deseamos crear en dicha infraestructura una delegación para el servidor DNS que vamos a instalar ahora.

Sin embargo, como no se encuentra un Servidor DNS principal, Windows Server nos muestra una ventana de aviso y nos informa de que, en caso de que sea necesaria, habrá que hacer dicha delegación a mano.

… Como no es el caso, basta con hacer clic sobre el botón Aceptar de la ventana de aviso y después clic sobre el botón Siguiente de la ventana principal del asistente.

El nombre NetBIOS puede tener hasta 15 caracteres formado por letras (mayúsculas o minúsculas), dígitos o guiones (‘-‘), aunque no puede ser enteramente numérico.

A continuación, en el paso Opciones adicionales, el asistente sugiere un nombre NetBIOS para el dominio raíz del bosque. Lógicamente, podemos aceptar el nombre que nos propone o indicar cualquier otro.

En nuestro caso, el nombre sugerido nos parece bien, por lo que lo dejamos tal cual.

Para seguir, hacemos clic sobre el botón Siguiente.

Los archivos de registro también suelen llamarse archivos log.

Después de esto, en el apartado Rutas de acceso, el asistente nos pregunta dónde queremos almacenar los archivos de trabajo de Active Directory (la base de datos, los archivos de registro y la carpeta SYSVOL).

Puede ser una opción interesante que los archivos de registro y la base de datos se almacenen en volúmenes separados. De esta forma mejorará el rendimiento (ya que se podrá acceder a ambos archivos de forma simultánea) y las posibilidades de recuperación de los datos si se producen problemas.

A pesar de todo, en la ventana aparece de forma predeterminada una ubicación de la unidad C. El motivo es muy sencillo: no tenemos otra.

Por lo tanto, nos limitamos a hacer clic en Siguiente.

En el apartado Revisar opciones, como cabe esperar, el asistente muestra un resumen del proceso de instalación. Debemos revisarlo para asegurarnos de que no hemos cometido errores en los pasos anteriores. Como es habitual, disponemos del botón Anterior para resolver cualquier error que podamos observar.

Si todo es correcto, basta con hacer clic sobre el botón Siguiente.

También disponemos del botón Ver script, que nos permite obtener un script de PowerShell para automatizar una instalación como esta sin tener que volver a introducir de nuevo todos los datos.

Por último, en el apartado Comprobación de requisitos, se verifica que el sistema cumple todas las condiciones para convertirse en un controlador de dominio.

Como puedes ver en la imagen siguiente, pueden aparecer algunos avisos, como el que nos informa de que no puede crearse una delegación para el servidor DNS que estamos a punto de instalar (ya comentamos esta circunstancia más arriba). También pueden aparecer errores que impidan la instalación del controlador de dominio. En estos casos, no podremos continuar hasta que no los resolvamos.

Como en nuestro sistema no han aparecido errores, podemos hacer clic sobre el botón Instalar para completar la operación.

Durante el proceso de instalación seguirán apareciendo mensajes informativos que deberemos tener en cuenta para una futura configuración del servidor.

Nos limitamos a esperar unos instantes.

Cuando termine la instalación, el servidor se reiniciará automáticamente.

Cuando aparezca el mensaje, hacemos clic sobre el botón Cerrar.

Al hacerlo, se inicia el proceso de reinicio

Sólo tenemos que esperar a que se complete.

El proceso puede durar más de lo normal, porque se está completando la configuración del sistema.

Cuando acabe, obtendremos la pantalla de bienvenida. Pulsamos las teclas Ctrl + Alt + Supr para autenticarnos.

Cuando finalmente se nos solicite la contraseña de la cuenta Administrador, veremos que ahora la cuenta aparece precedida del nombre NetBios del dominio (en este caso, SOMEBOOKS). Esta es la primera constatación de que todo ha sido correcto.

Si, durante la instalación, la contraseña que hemos escrito para iniciar en modo de restauración es diferente de la contraseña para la cuenta de usuario, debemos tener en cuenta que la contraseña que escribimos aquí NO ES la que usaremos para iniciar en el modo de restauración.

Nos limitamos a escribir la misma contraseña que utilizábamos hasta ahora.

La primera vez que iniciemos sesión con la cuenta Administrador, también observaremos que tarda bastante más tiempo del normal. El motivo, de nuevo, es que el rol que tiene esta cuenta dentro del sistema también ha cambiado y dichos cambios se aplicarán en este momento.

Para finalizar, podremos asegurarnos de que todo el proceso ha sido correcto, observando la pantalla de propiedades del equipo. Una de las formas más sencilla de conseguirlo es desde el menú Metro.

Hacemos clic sobre el menú Inicio.

De forma inmediata, la pantalla cambiará para mostrarnos el contenido del menú Metro.

Hacemos clic, con el botón derecho del ratón sobre el icono Este Equipo.

Cuando se muestre la ventana Sistema, podremos comprobar que los valores de los campos Nombre completo del equipo y Dominio son correctos.

Después de hacer la comprobación, podemos cerrar la ventana para seguir trabajando.

Y hasta aquí el artículo de hoy. Espero que te resulte útil.