Capítulo 7: Realización de tareas básicas (Parte 2)

Publicado por P. Ruiz en

Actualización del sistema operativo.

Actualización

Quizás se pueda pensar que un sistema operativo es un producto terminado y que las actualizaciones, aunque interesantes, no son realmente importantes. De hecho, hay usuarios que ven la instalación de actualizaciones como una pérdida de tiempo.

Sin embargo, estas son ideas muy alejadas de la realidad, ya que los sistemas operativos actuales son productos en continua evolución y, cuando están actualizados no sólo funcionan mejor, sino que serán más seguros. No debemos olvidar que algunas de las actualizaciones resuelven vulnerabilidades que han sido encontradas, bien por el equipo de desarrollo del producto, bien por los propios usuarios. Si no las corregimos, estaremos expuestos a que las utilicen los múltiples virus, gusanos o troyanos a los que estamos expuestos o cualquier individuo con los conocimientos adecuados, que puede tomar el control de nuestro sistema a través de Internet.

Independientemente de que el sistema operativo sea libre o propietario, las actualizaciones siempre son gratuitas.

Hoy en día, existen hackers que publican en Internet las vulnerabilidades que encuentran, lo que ayuda a los equipos de desarrollo de los sistemas a crear los parches que los mantengan protegidos. Sin embargo, esos mismos conocimientos publicados pueden ayudar a otros hackers a crear su propio código malicioso, lo que redunda en que los equipos que no se encuentren actualizados se vuelvan aún más vulnerables

Hay quien piensa que una actualización del sistema puede hacer que deje de funcionar algún programa o característica que funcionaba correctamente hasta ese momento. Esto, aunque es posible, sucede en muy raras ocasiones y los riesgos de no actualizar el sistema son mucho mayores. Además, ya hemos aprendido en los apartados anteriores cómo podemos ponernos a salvo de esa eventualidad creando puntos de restauración o, incluso, imágenes del sistema.

Diferencia entre Update y Upgrade.

Cuando hablamos de actualizaciones de software, existen dos términos en inglés que tienden a confundirse. Me refiero a update y upgrade.

En español, el término update equivaldría a una actualización. Es decir, poner al día el software existente, mejorando su seguridad o corrigiendo algunos de sus errores. Por su parte, upgrade estaría más relacionado con una mejora del producto, donde podrían añadirse nuevas características y funcionalidad (por ejemplo, la versión siguiente de software al que nos estemos refiriendo).

Normalmente, en el mundo del software propietario, los upgrades tienen un coste económico.

Actualizaciones en Windows

La forma más sencilla de mantener actualizado el sistema operativo con los últimos parches de seguridad es tener habilitadas las actualizaciones automáticas. De hecho, se puede activar de forma predeterminada cuando se instala el sistema. En cualquier caso, en SomeBooks.es ya hemos publicado artículos que nos muestran cómo lograrlo:

Actualizaciones en Ubuntu

El comportamiento predeterminado de Ubuntu respecto de las actualizaciones consiste en realizar comprobaciones periódicas en los repositorios para comprobar si se han producido cambios desde la última actualización. Estas comprobaciones se realizan diariamente de forma predeterminada, aunque este aspecto se puede cambiar.

En caso de encontrar actualizaciones, el sistema muestra un aviso para que decidamos si instalarlas en ese momento, o dejarlo para más adelante.

Existen dos ventajas en las actualizaciones de Ubuntu con respecto a Windows:

  • Que Ubuntu también actualiza todas las aplicaciones que hayan sido instaladas desde los repositorios.
  • Que el sistema puede avisarnos cuando aparezca una nueva versión del sistema operativo y aplicar el upgrade desde la propia herramienta de Actualización de software.

Para ver de forma práctica cómo funciona la Actualización de software en Ubuntu, puedes recurrir a alguno de los artículos que ya publicamos en SomeBooks.es: