Compartir archivos con un grupo de trabajo desde Ubuntu 18.04 LTS
Ya hemos visto en el artículo Usar recursos de un grupo trabajo desde Ubuntu 18.04 LTS, que Ubuntu incorpora todo lo necesario para acceder a recursos compartidos por los equipos Windows que formen parte del grupo de trabajo.
No obstante, si lo que necesitamos es que sea Ubuntu quien comparta, será necesario instalar algunos complementos más. Pero no te preocupes, se trata de una tarea sencilla, que se puede hacer de manera casi automática. A continuación, veremos cómo lograrlo.
Configurar Ubuntu para compartir archivos
Obviamente, lo primero que debemos decidir cuando pensamos compartir datos con los equipos Windows de nuestra red es, precisamente, qué queremos compartir.
En nuestro caso, usaremos una carpeta, a la que hemos llamado precisamente Compartir, y que hemos creado dentro de la Carpeta personal del usuario con el que hemos iniciado sesión.
Para comenzar, situamos el puntero del ratón sobre la carpeta y hacemos clic con el botón derecho.
En la ventana Propiedades de Compartir (el nombre cambiará en función de la carpeta que hayamos elegido), elegimos la solapa Recurso compartido de red local.
Si es la primera vez que tratamos de compartir algo, el sistema nos informa de que no está disponible el servicio de compartición y, por lo tanto, no podrá completarse la tarea sin instalarlo antes.
Si hemos llegado hasta aquí por error y no queremos continuar, aún disponemos del botón Cerrar para anular el proceso.
El asistente nos avisa de que la instalación del servicio de compartición conlleva la instalación del paquete samba.
Como ocurre siempre que necesitamos instalar algún componente software, el sistema nos solicita las credenciales de administración.
A continuación, el sistema nos muestra una ventana que incluye una barra de progreso donde se indica el avance de la tarea y el nombre de cada paquete particular que se va instalando.
También disponemos de una opción para obtener más detalles sobre la instalación.
Cuando se cierre el asistente de instalación, podremos seguir con la tarea de compartir.
En este punto, nos aseguramos de que permanece seleccionada la opción Compartir esta carpeta.
También podremos decidir si la carpeta será sólo para lectura o si los usuarios que accedan a ella podrán hacer cambios. Para ello, decidiremos si nos conviene marcar la casilla Permitir a otras personas crear y eliminar archivos en esta carpeta.
Por último, debemos indicar si vamos a permitir el acceso a personas que no dispongan de cuenta de usuario en el equipo desde el que estamos compartiendo. Igual que antes, decidiremos el comportamiento del equipo marcando, o no, la casilla Acceso invitado (para personas sin una cuenta de usuario).
En mi caso, he marcado ambas opciones
Puede que, cuando el sistema trate de compartir la carpeta, detecte que ésta no dispone de los permisos adecuados. Recuerda que en Linux podemos diferenciar entre los permisos del propietario, de su grupo y del resto de usuarios (llamados genéricamente Otros).
En este ejemplo, como vamos a permitir crear y eliminar archivos a cualquiera que forme parte del grupo de trabajo, aunque no tenga cuenta de forma local en el equipo, necesitamos que Otros tengan permisos de escritura en la carpeta.
Aunque Samba otorgue permisos a un usuario para realizar una operación, ésta no será posible si dichos permisos no están disponibles también en Ubuntu. Al fin y al cabo, es el sistema anfitrión quien debe facilitar los mecanismos que lleven a cabo la operación.
Por este motivo, aparece una ventana emergente que nos informa de la situación. Además, nos ofrece un botón para realizar los cambios, de forma automática.
Al hacerlo, volverá a mostrarse la ventana Propiedades de la carpeta que estamos compartiendo…
Cuando acabemos, veremos que el aspecto de la carpeta compartida ha cambiado ligeramente. Ahora incluye dos pequeñas flechas para indicarnos que ya se encuentra compartida.
Para nuestro ejemplo, situaremos en su interior la imagen con la portada del libro Conceptos básicos sobre sistemas operativos. Luego comprobaremos si está disponible desde otros equipos de la red que utilicen Windows.
Acceder desde Windows a los archivos compartidos por Linux
Desde el punto de vista de Windows, los datos compartidos por Ubuntu deben estar accesibles como si se tratara de otro Windows. Para comprobarlo, actuamos de la siguiente forma:
Al hacerlo, el sistema nos muestra la ventana del Explorador de Windows que, como es habitual, dispone de un panel de navegación a la izquierda y de una lista de objetos a la derecha.
En el panel de navegación, hacemos clic sobre el elemento Red. Al hacerlo, el panel derecho cambia para mostrarlos los diferentes dispositivos que configuran nuestra red.
En nuestro caso, hacemos doble clic sobre el icono que representa al equipo Ubuntu (en nuestro ejemplo, SOMEBOOKS-LNX) para obtener los recursos que comparte.
En ese momento, el panel derecho volverá a cambiar para mostrarnos los elementos compartidos por ese ordenador. En nuestro caso, la carpeta Compartir, con la que trabajamos en el apartado anterior.
Al hacerlo comprobamos que, en su interior, se encuentra la imagen que habíamos compartido (la portada del libro).
Y esto es todo por el momento. Espero que te resulte útil.